Cerca de Narva se encuentra el Lago Peipsi, uno de los lagos más grandes de Europa y una maravilla natural que se extiende a lo largo de la frontera entre Estonia y Rusia. Este vasto lago es tan amplio que parece un mar, pero no lo es. La región ofrece precios bastante asequibles, convirtiendose en un destino ideal para los viajeros con presupuesto limitado.
Si viajas en auto por Estonia, te recomendamos hacer una parada en el Lago Peipsi después de Tartu y antes de llegar a Tallin o Narva. Puedes detenerte durante el día o pasar la noche allí. Aunque hay pocos hoteles en la zona, si viajas en autocaravana, encontrarás fácilmente un lugar para estacionar. Además, hay áreas de acampada y sitios donde puedes montar una tienda de manera gratuita.
La región que rodea el Lago Peipsi es conocida por sus paisajes tranquilos y su ambiente relajado. Antiguamente, la zona fue habitada por rusos que venían a pescar. A lo largo de la costa del lago, encontrarás pintorescos pueblos. Uno de ellos es Mustvee, donde puedes sentir un ambiente ruso mientras paseas por sus calles. También notarás la cantidad de casas vacías y en ruinas, aunque algunas están siendo restauradas actualmente.
El Lago Peipsi es conocido por su rica biodiversidad. Su ecosistema alberga una variedad de especies de aves y peces, lo que lo convierte en un lugar popular para la observación de aves e ir a pescar.
En el lago habitan al menos 37 especies de peces. Hay muchos puestos de pescadores alrededor del lago donde puedes comprar pescado fresco, que está ahumado. El lago y su costa son el hogar de 180 especies de aves y se han registrado 266 especies diferentes en total, incluyendo muchas aves migratorias
El Lago Peipsi cuenta con una extensa y hermosa playa de arena que se extiende por varios kilómetros. Este largo tramo de playa es de acceso gratuito. El lago tiene un fondo relativamente plano y las playas son suaves, facilitando el baño. La profundidad del lago es bastante baja, con su punto más profundo alcanzando solo los 15 metros.
El agua del lago es relativamente limpia y, durante el verano, se calienta lo suficiente como para disfrutar de un baño refrescante. Aunque la temperatura del agua puede variar dependiendo de la temporada y las condiciones meteorológicas, en los meses más cálidos suele ser bastante agradable para nadar.
En la arena, a veces se pueden encontrar pequeños peces muertos, un fenómeno relacionado con la calidad del agua. El cambio climático ha calentado el lago, aumentando la eutrofización y la proliferación de algas.
Los restaurantes locales son poco frecuentes, pero ofrecen muchos productos del lago. Los pescados son ingredientes clave en muchas recetas locales. Los puestos junto a la carretera son los mejores lugares para detenerse a comer.
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